La falta de crédito, el poco creíble índice de inflación del Indec, la intempestiva toma de decisiones que afectan la seguridad jurídica como la estatización de las AFJP, la desaceleración de la economía y la recesión incipiente, la impresionante fuga de capitales al exterior de los últimos tiempos, las altas tasas de interés bancario, la nula reforma tributaria, el tipo de cambio menos competitivo con respecto a Brasil. Nada de eso se ha solucionado con las nuevas medidas anunciadas por el Gobierno nacional.
Según especialistas y afectados, a pesar del voluntarismo de las nuevas medidas económicas lanzadas por el Gobierno nacional, son varios los problemas de fondo que todavía aguardan respuestas igual de rimbombantes pero, tal vez, más efectivas.
Uno de los especialistas que más contrario se mostró al paquete de medidas "anticrisis" del kirchnerismo fue José Luis Espert, titular de Espert & Asociados. "Este Gobierno va en un corso a contramano como pocos. Todo lo que se anunció hoy es ridículo", sintetizó.
"Esta gente (por el kirchnerismo) no se da cuenta que Argentina, el único margen de acción que tiene es quién paga el costo de la recesión que inevitablemente va a ocurrir", explicó. Para el economista, no hay manera certera de escapar del proceso recesivo que se abate sobre el mundo a raíz de la crisis financiera mundial.
Pero fue más allá. "Si hoy Argentina no se escapa de la recesión es más culpa del Gobierno que de la crisis internacional, porque no tiene un margen para hacer una política fiscal expansiva ya que estamos al borde del default", reflexionó Espert.
En ese marco, el consultor planteó dudas sobre la repatriación de capitales anunciada por Cristina. "Nadie va a blanquear nada porque al tiempo le confiscan los fondos", sostuvo. También manifestó que el aumento de la inversión en obra pública "es contraproducente porque el aumento del gasto público es dinero que le van a quitar al sector privado".
Por ello, Espert aseguró que es necesario tener en cuenta que Argentina "está cerrada al comercio, hay fuga de capitales y no puede evitar la caída de los términos del intercambio", en medio de la desconfianza.
Entre las medidas, teóricas, que Espert consideró que es necesario adoptar, está "derogar la ley de eliminación de AFJP y recrear el sistema privado, congelar el gasto, congelar salarios y llevar el dólar a 4 pesos", ya que el tipo de cambio sufre un atraso, en comparación con el principal socio en el Mercosur, Brasil, que no se ajustó con las nuevas medidas.
Carlos Cacace, titular de la Unión Industrial de Berazategui, aseguró a Hoy que a los anuncios "en principio, hay que analizarlos bien, estudiar bien todos los proyectos; a partir de cuándo empiezan a regir porque según algunos enunciados será a partir de que tomaran los recursos de las AFJP".
Sin embargo, Cacace reclamó que el Gobierno subsidie la exportación y enumeró una serie de medidas que deberían complementar las anunciadas ayer. "Bajar las retenciones al agro porque no pueden trabajar con estos precios y recargar con aranceles internos a las importaciones", enumeró, con el objetivo de proteger a la industria nacional y al mercado interno de la crisis global.
"Si el Gobierno protege la industria nacional nosotros protegemos el empleo, como un pacto de caballeros entre ellos y el empresariado", concluyó Cacace.
Como se ve, los nuevas disposiciones no son suficientes para atenuar los efectos de la debacle, ante una recesión global inminente.
