BUENOS AIRES, (NA) – Economistas desecharon ayer por completo las propuestas de dolarización o devaluación como vías para que el país pueda salir de la recesión, aunque no descartaron que el Gobierno deba renegociar las metas fiscales pactadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El economista José Luis Espert advirtió que devaluar o dolarizar "pondrá a la sociedad en el medio de un caos" y agregó que esta discusión demuestra "el fracaso del modelo económico" del ex presidente Carlos Menem.
"Si el plan hubiera sido un éxito, hubiera estado acompañado de pleno empleo y de un gran crecimiento económico", afirmó, y añadió que "no le contesto otra cosa para no tener que enfrentarme a un juicio por calumnias". Afirmó que "devaluar o dolarizar es ridículo y nos conduce por uno u otro camino al caos de la sociedad".
Espert también dijo que si en un momento la decisión del Gobierno nacional es la de bajar impuestos o proteger la economía, "la vamos a pasar mal".
Afirmó que "si la política es la del gobernador (Carlos) Ruckauf, con leyes como las de compre nacional o de promoción industrial, vamos a dormir en una cama con clavos, porque también las vamos a pasar mal".
El economista jefe de Países Emergentes de ABN Amro Bank, Arturo Porzecansky, expresó que "hay que sacarse el sombrero" por el esfuerzo que está haciendo el gobierno de Fernando de la Rúa para cumplir con las metas fiscales de este año pactadas con el FMI.
No obstante, en declaraciones que efectuó a Radio Intereconomía, el economista consideró que "eventualmente habrá que renegociar las metas con el Fondo".
Las autoridades están tratando de cumplir lo más, que se pueda con el Fondo y se debe tener esa actitud para que no impacte tanto en el mercado", agregó. Dijo que "el número a cumplir es importe, pero no fue impuesto por el Fondo", sino para estar en línea con lo dispuesto por la Ley de Responsabilidad Fiscal.
"A menos que la economía repunte de la noche a la mañana, yo creo que la recaudación no va a alcanzar", agregó.
Proyectó que "si el crecimiento de este año es del 2 por ciento es mucho".
Destacó el esfuerzo del Gobierno para reducir el gasto público y tratar de incrementar lo más posible los ingresos.
Consideró que "si las autoridades continúan con su disciplina fiscal, haciendo todo lo posible para reducir el gasto y se logra una renegociación con el Fondo, los bonos argentinos no serán muy castigados" por los inversores.
Opinó que "los bonos argentinos se han revaluado muy poco y eso refleja las malas noticias que hemos tenido y las que se vienen”.
Por su parte, el ex secretario de Hacienda Juan Alemann se mostró abiertamente contrario a devaluar o dolarizar y, por otra parte, consideró que Argentina “está en un gran pozo depresivo”, a raíz de la recesión que comenzó hace dos años.
El economista dijo que "dolarizar no nos va a cambiar la vida" y agregó que "de hecho, más de la mitad de los depósitos y de las tres cuartas partes de los préstamos están en dólares".
En otro orden, señaló que ,estamos en una onda recesiva que se inició en el tercer trimestre de 1998", y advirtió que "cuando la crisis se prolonga sus efectos se potencian".
No obstante, afirmó que "cuando se llega al pozo en algún momento se va para arriba; en algún momento se producirá la reactivación, salvo que el Gobierno haga grandes macanas, como sería devaluar".
Por su parte, el economista jefe de Fiel Daniel Artana vaticinó que durante este segundo semestre, la actividad económica continuará "estancada", aunque aseguró que la Argentina "tiene capacidad de recuperación". "Lo que tenía que venir de afuera no vino, como una suba en los precios de exportación o una mejor situación cambiaria. Es cierto que está un poco mejor el clima hacia los países emergentes, pero en el exterior existe una actitud más pesimista respecto de la Argentina", añadió el especialista.
Artana sostuvo que "hay un montón de cosas para criticar" de las medidas que tomó el Gobierno, pero añadió que ,les cierto que la Argentina tiene un problema de competitividad que coincidió con una situación fiscal muy complicada".
Por eso, indicó que cuando un país tiene un problema de competitividad, "tiene más déficit. y se financia con endeudamiento. Pero la Argentina coloca deuda a una tasa de interés astronómica".