A pesar de la confiscación del ahorro privado de los trabajadores, el gobierno seguirá teniendo problemas de liquidez en 2009. Tal es la conclusión de un estudio realizado por Espert & Asociados.
Todos los sectores económicos privados que generen liquidez estarán en la mira del gobierno: está claro que se necesita caja para cumplir con los gastos de la campaña electoral y con (Néstor) Kirchner cualquier cosa puede pasar". Así lo indicó hoy a Infocampo el economista e investigador José Luis Espert, titular de la consultora Espert & Asociados.
"El interior del país será el que más va a sufrir las consecuencias de la actual política económica", apuntó Espert, para luego agregar que "inclusive ya se está hablando de que van a tener que implementar algún sistema de pagos mediante bonos".
Los cálculos realizados por el equipo de Espert indican que en 2009 ni siquiera con la confiscación de los ahorros privados de los trabajadores ni refinanciando deuda el gobierno podrá afrontar los compromisos externos.
Al gobierno nacional le seguirán faltando unos 3000 millones de dólares (M/u$s) para poder cumplir los compromisos de pagos externos durante el año 2009. Tal es la conclusión de un reciente estudio realizado por la consultora Espert & Asociados.
Muchos tienden a pensar que con la confiscación de los fondos de las AFJP buena parte del problema de la administración K está resuelto. Pero esto no es así, dado que el gobierno podrá contar solamente con unos 4000 M/u$s del total del dinero confiscado (alrededor de 90.000 M/$), dado que el resto se encuentra en títulos públicos, bonos, fideicomisos y acciones de compañías.
Otro aspecto que genera preocupación es que en los últimos cuatro meses se habrían "fugado" del país unos 14.000 M/u$s, un volumen equivalente al 5% del Producto Bruto Interno (PBI) (solamente en octubre, desde que se conoció el proyecto de estatización de las jubilaciones, se fugaron unos 4500 M/u$s).